Actualmente, este rol implica una evolución en la estrategia y la diversificación de funciones, con visión de futuro y éxito para la empresa
Con la pandemia por COVID-19, la vida marcó un repentino antes y un después, por lo cual, reinventemos al líder financiero. La transformación obligada, derivada de este cambio tan drástico y abrupto; logró que, reinventáramos los procesos, en especial los financieros, ya que, estos mueven al mundo.
Algunas de las responsabilidades clave de los directores financieros, son; cuidar los recursos, administrar de forma eficiente el presupuesto, llevar un estricto control de gastos y crear estrategias para la rentabilidad de la empresa.
Sin embargo, para que una responsabilidad de esta naturaleza se pueda desarrollar plenamente, se requiere de un liderazgo sólido; tener competencias suficientes, para estar preparado y afrontar los inesperados momentos de crisis económica o de salud.

Algunas de las características que hacen a un líder financiero ideal son flexibilidad, asertividad, trabajo bajo presión, temple para decidir con cabeza fría, y capacidad para diferenciar lo importante de lo urgente
Las crisis desencadenan diversos factores que ponen a prueba el carácter y la vocación.
El COVID-19 provocó un confinamiento, el cual, registró disminución de la actividad comercial y una baja de ingresos. Los gerentes se hicieron responsables de otras áreas, para mantener a flote la empresa; disminuyeron costos y gastos, el presupuesto se ejerció con un estricto control.
La reinvención de quien lidera las áreas financieras, sobre todo, en tiempos de crisis, se refleja en el modo como desarrolla su rol; para ir desde una posición de estrategia y planeación, hacia la formulación de objetivos empresariales, siendo un fiscalizador activo, el cual, revisa, controla, cuida y aprueba cada movimiento de la operación financiera de la compañía.
El siguiente paso de la reinvención del líder Financiero
Cuando las restricciones por el COVID-19 fueron reducidas, los negocios y empresas retomaron el camino que tenían antes de la crisis, se dieron cuenta del gran daño que se causó, sin embargo, la parte más retadora y difícil para el CFO (Chief Financial Officer) fue el proceso de estabilización del negocio.
Las empresas se están enfocando en una nueva prioridad, la cual es, la planeación hacia el futuro inmediato; también, en el trabajo presencial para los puestos que lo requieran y la redefinición de la estrategia de negocios a mediano y largo plazo, sobre todo; esto para afrontar la incertidumbre que dejó la pandemia.

PWC realizó un estudio en México con distintos empresarios; esta red de firmas especializada en servicios de auditoría, impuestos y consultoría de negocios, reveló que, a más de una tercera parte de CFO’s le tomará entre 6 y 12 meses regularizar sus operaciones.
Un 69% de directores financieros de México, considera que a la empresa le tomará hasta 6 meses recuperarse de los efectos de la pandemia; también, el 57% de empresarios encuestados hará cambios en su portafolio de productos y servicios, esto para, ofrecer soluciones mejoradas para reconstruir sus fuentes de ingreso.
¿Qué puedo hacer para reinventarme como CFO?
La Maestría en Finanzas de la IBERO Ciudad de México, te ayudará a formarte como profesional especialista, capaz de responder a este complejo y cambiante mundo de los negocios como líderes financieros. No solo para resolver problemas, sino que, para ser visionario; con la habilidad de formular mecanismos y estrategias que superen las prácticas tradicionales; reinventemos al líder financiero aprovechando las oportunidades para la creación de valor.
Necesitamos líderes en finanzas, que puedan afrontar y superar los momentos más difíciles de la historia, teniendo como base la formación humanista, el cual es, uno de los pilares que nos distingue.